Nació el maestro Antonio Lauro, en ciudad bolívar el 3 de agosto de 1.917, quizás con la vocación musical por dentro, por cuanto su señor padre Don Antonio Lauro Ventura, aparte de ser próspero comerciante y barbero, tocaba el bombardino, y solía cantar con voz muy afinada, acompañándose con su guitarra la cual tocaba con mucha destreza. Sus inquietudes musicales nacen siendo niño, ya que veía y escuchaba a su padre en los conciertos donde éste participaba en Ciudad Bolívar, una localidad de mujeres cultas y de hombres solventes y económicamente prósperos.
Cursó el maestro Lauro, estudios en la Escuela de Música “José Ángel Lamas” de Caracas, donde se graduó de Maestro Compositor el año 1.947. Realizando estudios de Composición con el maestro Vicente Emilio Sojo; Guitarra, con Raúl Borges e Historia de la Música con Juan Bautista Plaza.
Se dedicó a la labor docente musical en Colegios y Liceos de Caracas donde fundó distintas corales; formó parte de la Orquesta Sinfónica Venezuela, durante veinticinco años; perteneció a la Tribuna de la Catedral de Caracas durante diez años, y por largo tiempo dictó las Cátedras de Guitarra y formas musicales y Análisis, en el Conservatorio de Música “Juan José Landaeta”. La obra del maestro Antonio Lauro se encuentra marcada por un profundo sello nacionalista Es el continuador de la tradición valsística del siglo XIX (19), constituyéndose en el Maestro del Valse Venezolano para la Guitarra. En las composiciones del maestro Lauro, se observan la gracia y espontaneidad propias de la música popular combinadas con un buen cuidado académico. Utilizó con frecuencia los recursos impresionistas, conservando su música, un carácter tonal. Sus admirados valses han recorrido toda la Geografía Universal, siendo difundidos por su colega, y amigo el celebrado Maestro Alirio Díaz. Por todos los guitarristas, y las más prestigiosas escuelas y por él mismo en innumerables conciertos celebrados en distintos lugares del mundo.
Entres sus obras para guitarra pueden destacarse su Sonata, la Suite Venezolana, los valses Natalia, María Luisa, María Carolina, El Niño, El Negrito; piezas como el Bambuco Tachirense, Variaciones sobre una Canción Infantil, Pavana al estilo de los Vihuelistas. Igualmente sus obras corales, dos conciertos para Guitarra y Orquesta; obras sinfónicas, como Los Giros Negroides y Cantaclaro (Poema Sinfónico) El Maestro Antonio Lauro, falleció en la ciudad de Caracas el 18 de Abril de 1.986, dejando al país un legado de obras de un valor incalculable, las cuales enriquecen el Acervo Cultural de la Nación.